R de recuerdos...

hace poco me preguntaron qué había más en mi vida, si momentos buenos o momentos malos... que por que por algunos textos en papel que había escrito parecía que eran puros momentos malos, y yo simplemente dije que me era mas fácil escribir cuando todo iba mal, pero que realmente eran más los buenos momentos, y que en caso de que fueran equivalentes, había momentos buenos que por la magnitud de estos podían superarlos... y pues me puse a recordar ese tipo de momentos...

- Cuando era niña y jugaba a ser una sirena en la alberca, en unas vacaciones, estaba jugando sola y realmente sentía que era una sirena jaja (que tonta pero era muy chido ser una sirena)...
- Cuando apareció Oscar, originalmente como gasparín, luego como Peter Pan, hasta ya definirse como Oscar, realmente era muy divertido jugar con él y hasta el momento el hablar con él es muy reconfortante y necesario.
- La 1ª vez que mi madre me llevó a ver Peter Pan al teatro, Wow, yo decía si el puede yo puedo... digamos que es de esas cosas chidas que marcan...
- El concierto de Mano Negra en el toreo (acompañados de la maldita vecindad, café tacuba, caifanes, creo que fobia y no se quienes más) fue un muuuy buen concierto, en los mejores lugares y creo que era de los primeros si no es que el primer concierto en mi vida...
- Salir del concierto de la maldita vecindad en el LUCC y para perder el tiempo planear perfectamente un asalto a un banco y planear incluso lo que se haría con lo robado (obviamente nunca se consumó el acto)
- Las noches en rockotitlán...
- Pese a lo doloroso que fue para mi cambiar de residencia, el hecho de llegar a la estación de trenes y ver que había gente ahí para despedirme... todo el viaje lloré y pese a que podría sonar todo lo contrario, lo recuerdo como una imagen muy chida vista desde fuera...
- El ser seleccionada para locutora de radio, siendo que realmente yo estaba ahí haciendo el casting para matar el tiempo mientras unos amigos terminaban de presentar un examen y a eso aunarle el hecho de que después de unos pocos meses me dieran un programa para mi solita de una hora, en la que podía hacer lo que quisiera... era muy rico el tener una hora al aire para mi sola... y mejor aun si había alguna llamada...
- El conocer a los de nosotros los pobres y que me pidieran representarlos... y de ahí encontrar a la única mujer que puede valer la pena como amiga: caótica...
- El fugaz fin de semana a san Miguel de Allende, distancia y después, una semana en Playa Michigan, de incógnita y con la playa vacía y virgen...
- El semestre en Guanajuato... tuvo momentos muy mágicos y unos un tanto oscuros, pero de plano nada era cotidiano en ese lugar... la piedra de deseos (un desconocido se acerca y me dice que meta la mano en su morral –yo desconfiada no quería- y me insiste y la meto y saco un cuarzo en bruto grande y el me dice “es un gran deseo el que puedes pedir, cuando se haya cumplido otórgaselo a alguien más” y se va), un hombre explicándome un cuadro del Quijote en el que lucha con los gigantes que para el resto del mundo eran molinos (precisamente en el momento en el que estaba a punto de mandar todo al diablo y regresarme por donde venía), los atardeceres leyendo a la luz de un farol (mientras alguien observa oculto desde su ventana), el vivir sola por primera vez en mi vida, un amanecer huyendo del sol (en noche de muertos 3 seres caminan por todo el pueblo, tienen la piel extrañamente azul, cuando comienza a llegar el sol algo se rompió entre ellos, pero el halo de magia los cubría del rayo del sol), la eterna espera en el balcón, el amanecer a los pies del coloso de cantera rosa (y ver como pasaba mi última noche ahí , frente a mis ojos)...
- Las tardes en la barra del infinito, leyendo y tomando verdadero café molido, por cargas (solo a veces endulzado un poco con macadamia)...
- El clavarme tomando fotografías, en donde fuera y a lo que fuera, las tardes que agarraba la cámara y sin decirle nada a nadie simplemente me salía a ver todo a través del lente... era muy rico...
- La 1ª vez que vi Rosencran y Gildenstein están muertos (o algo así, no tengo el dato exacto a la mano) en el patio de la escuela de teatro y decidí que yo quería hacer eso...
- Mis primeras clases dentro de la escuelita de teatro (danza, biomecánica –lograr romper la pose de maestro inquebrantable y sanguinario de vic, y comenzar una amistad muy rica con él-, las clases de actuación, las luchas de ego con Elias en la clase de análisis de texto –también acabar siendo muy buenos cuates-, mi primer performance como examen final (siendo que era en grupal mi parte fue un dueto),
- Por la época, el reencuentro con la salamandra letal, el establecer algo mucho mas sólido con Caín, y pese a que en momentos la temporada baet era un caos... había momentos muy buenos, de fuga pero realmente divertidos y eufóricos...
- La primera vez que pisé un escenario, la gira hacia Acteal, los ensayos de banquete, la casa luba...
- Las escapadas sola a Real de 14, la tarde en que nevó, el pueblo fantasma vacío y yo leyendo en voz alta a Chumacero y a Sabines, la eterna caminata hacia el cerro del quemado y el acostarme agotada al centro (y sentir tooodo lo que sentí tumbada en ese suelo), el salvar la vida gracias a Oscar en la mina, los cafés en el cactus (escribiendo en el diario plateado); la vez que fueron el alebrije y Caín... esa vez, la única que probé el venado... wow que experiencia tan pesada, chida, simbólica, eterna, no se de esos sucesos raramente repetibles...
- Todas las veces arriba de un escenario (banquete, contraseña, gx, los monólogos de hamlet, los performances de la casa Luba... y sobre todo, todo el proceso de Alice & Lewis... tanto ensayos, tras ensayos, funciones... realmente no importaba lo que pasara con mi vida personal en esos momentos fuera del proyecto, lo que vivía con respecto a Alice & Lewis era de lo más chido, rico y satisfactorio que he vivido...
- la vez que fui a la madre urbe a ver a la salamandra y que en coyo vi a oscar en carne y hueso; momentos después un café con un desconocido que realmente me hiso sentir muy especial (a veces suele ser asi no?)...
- Muchos momentos en la madre urbe... el ir en el metro, el sentirme independiente, el sentir que estaba luchando por cumplir mi sueño y que era algo que pocos hacen, el vivir en un sótano, los baños de tina, las caminatas solitaria en el zócalo, en coyoacán... igual y esto suena muy general, pero es que eran momentos en los que me sentía muy bien, muy viva, muy yo... y pese a que nada parecía fructificar, el estar haciendo lo que hacía me hacía sentir muy viva... (a parte de que conocí gente muy chida que me tendía la mano ciegamente y que con una sonrisa podía cambiarme el humor)
- Estar en el casting para de la guarda (aunque lo que haya pasado posteriormente me haya derrumbado muy cañon)
- Las primeras funciones de “cariñosamente infieles” pero solo las primeras... lo admito, lo que pasaba tras bambalinas también era muy divertido...
- la época en que realmente sentía alas, que sentía que tenía el poder de cumplir deseos y que estaba completamene segura de que el velo se rompería...
- los fines de semana con vik en cuerna y en acapulco, nada como un amigo asi para ese tipo de fines de semana... con todos los lujos posibles, yakuzzi, suites, albercas privadas, buena comida... de lo más snob, pero realmente solo faltaba alguien dandonos masaje jajaja...
- Mmm cualquiera diría que un viaje a Tailandia es un momento bueno... y si, hubo momentos muy buenos, pero realmente no fue de lo mejor que he vivido... quizá las circunstancias y la situación no era la adecuada... aunque admito que de vez en cuando recuerdo mucho las calles de bankok, las playas de Kho Chang, los vendedores y el regateo, los olores, los sabores, los canales de Damnoen Saduak, las ruinas de Ayutthaya, los templos, la gente, el té verde espeso que vendían en el 7eleven, hubo momentos de silencio que fueron muy disfrutables... (wow precisamente ahora me entraron unas ganas locas de estar allá)
- Las vacaciones de diciembre (que posteriormente ya no fueron vacaciones) en que me reencontré con mis amigos de aquí, que me divertí como hacía mucho que no lo hacía y me ayudaron a darme cuenta de que me estaba convirtiendo en alguien que no quería ser, sentir que había gente aquí que en verdad no me juzgaba por lo bien o mal que me pudiera estar yendo y realmente sentía que habái gente orgullosa de mi... las noches de antro (suena superfluo pero realmente me hacían falta después de casi no salir por precariedades emocionales y económicas)...
- (viene el momento meloso) El primer encuentro realmente etílico y casi sin palabras, la incómoda ida al cine (realmente incómoda), las caminatas nocturnas en invierno, las eternas pláticas por teléfono en las que parecía faltar tiempo, los momentos de risa espontanea e imparable, aquel cd de Björk que acababa con la de la mochila azul (jajaja), la música compartida, noche con lluvia afuera, mi cumpleaños 27, los momentos entre sus brazos (incluidas las noches), la casa de la caótica, las mañanas de correr, el primer desayuno (jaja con todo y cruda), las despedidas y los reencuentros, el sega, los cuestionarios con café, algunas movies en mi casa o en el cine, el baile en el barzón... y ya por que ya rayó mucho...

Insisto, si hay muchos buenos momentos, solo que, como se puede ver, nunca he superado la redacción parca para esos momentos... pero si tengo muy buenos recuerdos de mi vida (auch cuando digo cosas así siento que envejezco como 10 años en un segundo) y para no variar y no negar mi naturaleza humana siempre se siente que tiempos pasados fueron mejores (y que la persona que éramos antes es mejor que la que somos ahora...bueno eso solo a veces)...

Y bien terminemos con los recuerdos... que a parte de servir para robar suspiros, a veces para sentirnos muy bien, a veces para aplastarnos, a veces para sentir como pasa el tiempo y a veces para hacernos ver claramente como todo siempre tiende a complicarse o desaparecer...

Hoy no hay muchas recomendaciones del día:
http://www.psicobyte.com/ (otro del grupillo de arkangel)
http://laberinto.arkangel.info (del mismo grupo pero una mirada muy femenina)