2o aniversario de la nada de un hada urbana...

En realidad el aniversario fue el 23, ya hace 2 años que comencé con la nada y en ocaciones las palabras no fluyen tanto... en realidad hoy no hice ni borradores, va directo sobre el post, sobre el blog... hay muchos ciclos en estos dos años, en general no puedo quejarme, pero es a veces, solo a veces cuando esa inmensa capacidad que tengo de hacerme mierda emerge... quizá es la gripe, quizá son los días, pero de repente, esta semana ha sido gradualmente autodestructiva... nuevamente es solo mi mente... siempre ha sido solo mi mente... y ese no es el mood para celebrar un 2o aniversario... pasaran los días, se me quitará la gripe y quizá entonces mi mente se tranquilice y pueda celebrar... hoy aun no...

RESPIRO Y BUSCO LAS LETRAS EN EL TARAY III…

Vengo cargando la semana y es sorprendente como va gradualmente pasando el efecto de la ecodroga del fin pasado…
Creo que el domingo fue el día más chido, por que fue cuando yo me conecte al lugar de plano, de una manera quizá muy triste pero chida… Despertamos como a las 7, el frio calaba hasta el fondo y eso que la cabaña era mucho más caliente que las tiendas de campaña. Samara de plano desertó y se acabó refugiando en la cabaña ya casi en la madrugada, yo lo admito, el único pero fue que el piso estaba muy duro, fuera de eso, dormí muy bien.
Después de que todos despartamos y desayunamos, había que prepararnos psicológicamente para subir a la sierra para por fin ver a la dichosa cotorrita serrana. Fue como una hora de subida medio pronunciada, me fui hasta atrás del grupo, par ano estorbar si me detenía a fotografíar algo y para arrear a los que se fueran quedando atrás, lo admito, me daba miedo darme cuenta que no aguantaba la dichosa subida, sin embargo si aguanté más que algunos que no fuman. Al llegar arriba ya estaban explicando el rollo de la cotorra… bueno en resumidas cuentas, la Cotorra Serrana es un animal bandera, es decir, un anima bonito, cute o atractivo que cause ternura y que al momento de que digan que está en peligro de extinción se le mueva el corazón a la gente y así jala hacia el fenómeno y es más fácil difundir el transfondo de que ese animal esté en peligro de extinción. Y en este caso por ejemplo, pues la dichosa cotorra Serrana no tiene predadores, ni nadie los casa, pero la razón de que se esten extinguiendo es que ellas se alimentan de piñones, los cuales provienen de los pinos y pues con la tala de árboles, la introducción de especies exóticas que vienen con plagas ajenas contra las que no tiene defensa nuestra flora regional. El chiste es que pues lo que también se está reduciendo más críticamente es el pino piñonero (o algo así) por la deforestación y las plagas y eso conlleva a que la Cotorrita Serrana Oriental se esté extinguiendo… Y realmente aprendí más de un árbol que de la cotorrita serrana, por que esta la vi muy de lejos y con binoculares.


(Reaunudo el borrador una semana después)
El ecosicólogo nos puso una dinámica, teníamos que escoger algo del entorno, pedirle permiso para hacer la dinámica y pues hacerla (la cual consistía en hacer que nuestra respiración dependiera del contacto con el objeto, luego observarlo detenidamente, sentirlo, imitarlo, cantar con él, escucharlo realmente en su lenguaje, etc…).
El chiste es que yo me encontré a un pino que no estaba muy viejo que digamos, empecé a hacer la dinámica y de repente, en una de las veces que lo agarré para poder respirar, sentí una herida del árbol… momentos antes Rubén nos había explicado las señales de plaga en los pinos, y la sentí, un agujero en la capa superficial del tronco, pero con un recubrimiento burdo de recina… eso era señal de que tenía plaga y que habia tratado de expulsarla pero no había podido, y fui poniendole atención a cada parte del árbol, hasta que me di cuenta de que estaba totalmente invadido, viendo más arriba, sus ramas estaban casi secas, pero en la punta de algunas, conservaba un poco de vida, como si fuera su manera de demostrar que aun estaba vivo que no lo cortaran… la piel del árbol estaba cuarteada, se podia soltar en fragmentos con el simple roce… me dio tanta tristeza… y admito que no seguí al pié de la letra la dinámica, podría decirse que a raiz de eso el árbol me fue dando la pauta para saber que hacer y como hacerlo. El chiste es que de estar profundamente triste por darme cuenta de que ese arbol estaba a punto de morir, gradualemtne el mismo me fue enseñando de que, pese a eso, estaba bien, estaba rodeado de pinos jóvenes, muchos insectos vivos, magueyes a punto de florear y pues estaba ubicado en la base de la pared de rocas que habitan las cotorras, osea que alcanzaba a oirlas cantar… y pues finalmente, el sentimiento fue teniendo una evolución y acabé profundamente agradecida por que me había compartido unos de sus últimos momentos…y la vida seguía…
Igual y alguien puede decir, no te lo permitió, tu te le impusiste, el no se podía ir ni decirte que te fuera… pero en realidad, si te abres completamente, puedes sentir el rechazo o ver las señales de que un árbol, planta, pino o demás, no quiere estar contigo, se siente, o simplemente no me hubiera enseñado tanto en tan poco tiempo…
Pero bueno, igual y cualquier otra persona hubiera tenido una experiencia diferente…
La última actividad que tuvimos en aquella zona del Taray fue pintar con acuarelas, lo que en mi persona resultó ser un fiasco, por las prisas y por el poco control que tengo sobre las mismas, yo de plano prefiero los colores de madera aunque digan que soy una rigida…

Bajamos para recoger todo e irnos… siempre es difícil regresar a la ciudad y eso que soy un hada urbana… pero si es como que un shock, admito que tampoco podría estar todo el tiempo en un área así… esa permanente dualidad… en todo…
Ya al regresar, la bienvenida en mi depa fue deliciosa y ad hoc… el ahí =) me gusta que me reciba cuando me voy lejos aunque sea por un finde… me hace sentirme más en casa...

RESPIRO Y BUSCO LAS LETRAS EN EL TARAY II…

Bueno, pasando del mood sensitivo en el que me puso la dinámica de oler, probar, sentir, oir y demás (por que no solo con los sentidos hacemos contacto ocn el exterior).
Llegó un momento en el que cuando nos pedían que compartieramos lo que habíamos sentido o experimentabamos me volví un tanto egoísta con lo que decía y pues de repente nadamás soltaba tantito de lo que habia vivido, ah por que luego habia cada personita que parecía más una lucha de ver quien sentia mas o más chido y dije no que hueva…
Bueno, el chiste es que luego nos soltamos caminando por el lugar haciendo un recorrido biológico (osea, un chavo nos iba diciendo que hierba, arbol, animal o lo que fuera era cada cosa que nos rodeaba y ciertas características de la misma). Total que ahí andaba yo probando, oliendo y demás pero ahora si con los ojos abiertos. Es sorprendente como somos a veces medio quisquillosos los citadinos, luego por eso nos andamos enfermando con cualquier cosita. El chiste es que pues me decía no pues que esta planta sirve para desparasitar y pos por si tenía parasitos o no, me la comía. Luego un árbol pocamadre daba unas frutitas que les dicen borrachitas (jaja eso me dijo un biologo) que dicen que a los osos les gusta mucho y que tienen como pequeñas cantidades de cianuro y pues ahí voy a ver a que sabe y como pone (las amarillas sabían del nabo, las rojas sabían mejor, como quiera con ninguna de las dos sentí nada) o una calavaza salvaje también ahí andaba (esa si sabía super amarga!!!). El chiste es que hasta la fecha no me enfermado ni nada, así que muchas veces es más el rollo de que nos enseñaron que lo que está en la naturaleza nos hace daño, es sucio o es malo (otra predisposición urbana). Y bueno no hay nada mejor para sentir cierta libertad que no poner esas trabas y dejarse experimentar…
(el día de hoy ya no fluyen tanto las palabras…).

Ahí tomé de mis mejores fotos… En esa zona es muy loca la vegetación, juntos podían estar un pino, un maguey y un nopal casi casi acariciandose. En cuanto a fauna, vi un burrito (jaajaj), lagartijas, un ratoncito precioso que hasta se dejó acariciar (no supe si por que confió en mi o por que estaba paralizado del miedo), unas aves azules muy chidas, buitres cabeza roja… no se… el chiste es que al regresar plantamos un pino piñonero y me cae que cuando haces algo asi si te encariñas con el arbol, arbusto, planta o lo que sea que plantes (a ver si sobrevive el pobre por que creo que tengo muy mala mano para las plantitas).
Subsistí de sanwiches de queso, barritas de branfruit y agua (no me dieron ganas de fumar en todo el fin jajaj =)). Tipicos los comentarios de curiosidad hacia los vegetarianos (Samara está mas severa por que ella Ens. Vida ha probado la carne por que sus papás son vegetarianos desde jóvenes) pero en esta ocasión no dije absolutamente nada de mi posición al respecto, así que como nunca, simplemente me mantuve como observadora ante los comentarios, cuestionamientos y comentarios de burla o incomprensión ante alguien con el que la mayoría no comparte los patrones alimenticios (lo que posteriormente me reprochó Samara jaja).
En fin, si el resto fue platicar en bola, comentar la experiencia del día y ver que todos somos bien amantes de la naturaleza y somos bieeeeeeen sensibles y casi casi tarzán era un civilizado a comparación de todos los presentes ese día… si muy mamonamente preferí guardar silencio o hablar lo elementalmente necesario.
En la noche una chava biotecnóloga resultó ser muy clavada en la astronomía y ahí andaba diciendonos no se que de las constelaciones (muy básico para ser tan experta, no supo ni decirme cual era orión =P) y mejor yo por mi lado estuve viendo a Venus, orion (que yo si la vi), la vía láctea (que desde playa michigan que no la veía tan claramente), me ganó el frió y el sueño (a las 11 de la noche, eso fue sorprendente) y me fui a dormir, que considerando que no habia nada de luz (osea no había energía electrica) y dependías de la linterna que hubieras llevado. No había nada mejor que hacer, así que me metí a la cabaña (por que ni de faul me quedaba en casa de campaña estando tan calientita la casita) acomodé mi sleeping y a dormir (no podía ver ni mi mano frente a mi nariz de lo oscuro que estaba).
A ver si mañana amanezco más en equilibrio con mis palabras, por que el último día fue de lo más intenso…

otra vez continuará en espera de un mejor fluir de las palabras...

RESPIRO Y BUSCO LAS LETRAS EN EL TARAY…

Últimamente ha sido el lenguaje de las imágenes el que he estado explotando, he estado buscando recuperar ese idioma y gradualmente lo estoy haciendo, quizá por eso las palabras no han fluido tanto y cuando lo hacen lo han hecho como recuento de mis pasos, lo necesitaba, o quizá mis letras lo necesitaban, una especie de liberar eslabones y aceptar los que serán para siempre…
El fin de semana pasado fui al Taray, una reserva ecológica en el estado de Coahuila, como parte de un módulo del programa de liderazgo (me choca esa palabra) ambiental que estoy tomando, en esa reserva vive la cotorra serrana que está en peligro de extinción… lo admito, una de las principales cosas que quería hacer era ver bien a dicha cotorrita, y fue lo que menos hice.
De unas cuantas semanas para acá había sentido una evidente “discriminación” de los cientificos ambientales hacia los humanistas ambientales… bueno, prácticamente desde que comence a ser ecologista, pero pues de cierta manera como que no lo notaba tanto por que pues finalmente no estaba tan involucrada y pues de cierta manera lo justificaba, pero no me importaba. Ahora que llevo ya casi 2 años en esto como que ya cala.
Nunca he podido estar en un lugar sin involucrarme e interesarme, y pues ahora menos que nunca… realmente me gusta lo que hago y cada vez me interesa más y quiero saber más (ahorita me siento como una esponjita que todo absorve en materia ambiental jajaj). Pero aun sigo ayendo comentarios de biologos o ingenieros como: “y tu como comunicóloga ¿como es que llegaste aquí?” con un tonito detrás que suena como “mejor dejale ese trabajo a alguien que sepa (osea un biólogo, un químico o un ingeniero).
Concretamente no puedo definir como llegué aquí, siempre me pasa, un día de repente ya era locutora y estaba super involucrada investigando sobre grupos, contactando bandas y hasta lograr una exclusiva local (amantes de Lola jajaj); después ya era representante y ahí andaba viajando al DF para que les dieran chance de tocar en el stock y lugares así; yo nadamás me metía a estudiar teatro por que me latían las materias y de repe ya andaba dejando toda mi vida en Monterrey y matandome a diario en el DF para actuar por allá. Un amigo una vez me dijo: “es que tu no sabes que es lo que quieres por eso andas de comunicóloga, actuando, quieres una maestría en antropología, andas de fotógrafa y demás” a lo que yo contesté: “si se que es lo que quiero, lo quiero todo” (obviamente refiriendome a cosas que hacer y aprender).
Y pues gradualmente me he ido involucrando más y más con todo lo que tenga que ver con la ecología, aprendo mucho todo el tiempo y pues ignorante ignorante no soy… y pues podemos decir que le dedico a esto no solo el tiempo del trabajo, sino incluso ya he modificado algunas cosas de mi vida en general (aclaro, soy ecologista racional no radical) por eso quizá me molesta tanto que hagan ese tipo de comentarios, finalmente fue una ingeniera la que sin conocerme y tras ver mi currículum confió en mi y consideró que yo era la adecuada para hacer esto ¿no?.
Y pues bien, volviendo al fin de semana, hubo muchas cosas chidas que me calmaron, me enseñaron y me movieron este fin de semana... (sigue después de la foto)

Mis expectativas realmetne eran elementales: “ver a la cotorrita serranera que está en peligro de extinción”.
El “guía” de las sesiones prácticas realmente se me hizo un ser de esos que te dan ganas de absorverles el cerebro mientras te tomas un cafecito y te echas una platica de horas. Resultó que no es ni biólogo, ni químico, ni ingeniero en nada… es un psicoecologista (o ecopsicólogo). Y eso fue muy chido, por que platicándo con él me dí cuenta de que mis teorías y mis corajes ciencia vs. humanismo tenían un eco. De poco sirve que los científicos elaboren miles de formulas, aparatos e investigaciones para mejorar la calidad del medio ambiente mundial si no hay también proyectos enfocados a la educación, modificación e investigación de patrones de conducta del ser humano que es el que en muchas ocaciones tiene tendencias destructivas o nocivas hacia la naturaleza (por una falta de identificación, ideas antropocentristas, entre otras miles de cosas).
Y pues ahí es en donde el psicoeologista y yo coincidíamos en muchos apectos, la mejor manera de lograr mejoras ambientales se lograría de una mancuerna científico-humanista. (Qué clavada amanecí hoy me cae).
Bien, esa fue en resumen una de las primeras sorpresas y aprendizajes del fin.
Otro de los felices redescubrimientos este fin fue el aprender mañas con la cámara digital y darme cuenta de que hasta eso n o he perdido el ojo de fotógrafa. Tomé unas fotos que la verdad me latieron mucho, aprendí a jugar con muchos botoncitos, a moverle y a ajustarle varias cosas a la cámara digital (yo creía que solo con las reflex se podían hacer ciertas cosas, o con las digitales profesionales) a tal grado que llegué a domarla y logré nuevamente que por medio de la cámara se viera lo que yo quería que se viera… hacía muchisimo tiempo que no me emocionaba tanto al ver una foto tomada por mi o que no me gustaba realmente una foto tomada pro mi (a excepción de la colección de fotos del cielo que tengo en mi celular). Pero las tomadas en el Taray me gustaron a mí y creo que soy la juez más cruel y visceral que puedo tener.
Hubo algunas dinámicas muy chidas tanto te integración de grupo como de identificación con la naturaleza. Me sentía de repente medio rara por que todos son estudiantes y yo pues mmm hace tiempo que no lo soy. Así que yo prefería hacer las dinámicas con Samara y pues fue mejor por que la neta algunas de las que hice con otras personas como que mmm si fueron medio un fiasco, por que como que mmm ok lo admito a veces soy tímida y cerrada y pues para cierto tipo de dinámicas que impliquen emociones o abrir ciertas fibras sensibles, pues como que si necesito como que haya cierta vibra, concocimiento previo, química o en pocas palabras, que no me incomode la otra persona. Alguna vez Jorge Luis Paz (el de acrobacia de la escuela de teatro) nos hizo un recorrido sensitivo en la Estancuela, pues ahora asi como el juego del ángel y el protegido, uno guiaba a otro con los ojos cerrados, pero con la diferencia de que en este ejercicio el rollo era que a parte de cuidarlo, tenías que hacer que la otra persona oliera, sintiera, probara y oyera su entorno sin dejar que la vista acaparara su atención, y pues fue muy chido hacer ese ejercicio con Samara (pese a que ella esta mucho mas alta que yo y tenía que andar cuidandola de objetos que me quedaban a una distancia un tanto difícil de alcanzar). Reiteré que después de la vista el olfato y el tacto me mueven y puedo vivir de ellos. Conocí el Hierbanis (el olor me sorprendió tanto que no pude evitar comer un poco), sentí una planta como terciopelo duro, a punto estuve de comerme una frutita que tronaba muy rico, me enredé en una telaraña… no se, siempre he sientido que cuando andas con los ojos cerrados en eese estado y en ese mood todo se vuelve blanco e ilimitado y te vuelves como un receptor ambulante…

Otra vez tendré que dejar un post en continuará…